Balonmano

El balonmano se considera una versión mejorada y más versátil que el fútbol, pues se pueden emplear patadas, pases, lanzamientos y bloqueo en el arco. Es un deporte de contacto que amerita mucha agilidad y estrategia. Ya son tantos sus fanáticos que cuenta con una federación que registra equipos de todo el mundo. Se le considera como una fusión de deportes.

Historia del balonmano

En comparación con otros deportes, el balonmano es una disciplina muy joven. Sus primeros jugadores fueron registrados en los años 20 en Europa, específicamente en Berlín (Alemania), aunque su auge se vio afectado por la Segunda Guerra Mundial. Tras el término de la contienda, su práctica fue retomada con mayor fuerza y se le considera una mejora del fútbol que conocemos. No obstante, según algunos historiadores del balonmano, en las islas británicas se practicaban durante la Edad Media diversos juegos que manejaban normas similares a lo que hoy día es el fútbol. De hecho, hacia finales del siglo XVII era tan común su práctica que se crearon derivados que llevaron de una disciplina a otra, como, por ejemplo, del rugby al fútbol americano y de éste al fútbol australiano, entre otros.

Del otro lado del mundo, durante la época precolombina y en lo que ahora se conoce como México, la civilización azteca jugaba el denominado Juego de la Pelota, con una variación bastante peculiar: se  empleaba una pelota rudimentaria hecha con material de caucho tomado de los árboles. La bola en cuestión, que resultaba bastante pesada, debía pasar por un aro hecho de piedra ubicado a una altitud considerable. No se permitía el uso de manos, solo los pies, las piernas y la cadera, está última era la parte del cuerpo permitida para hacer la única anotación de todo el partido; no había equipos solo unos contra otros. Los grandes guerreros y personalidades más importantes de ese entonces tenían el privilegio de practicarlo en campos similares a los del fútbol actual. Quienes lograban "anotar" obtenían el premio más sagrado e importante para ellos y su cultura: la muerte (esto les permitía el ascenso hacia las estrellas, donde se encontraban sus dioses y les garantizaba la eternidad).

El balonmano contemporáneo

Pero el verdadero balonmano evolucionó considerablemente durante el tiempo y, por tradición, los equipos de Austria, Dinamarca y Alemania son los que más destacan en la práctica de este deporte, el cual pasó a categoría olímpica en 1934, cuando el Comité Olímpico permitió por primera vez la inscripción de esta disciplina para los juegos de 1936 (aunque con muy poco quórum). Apareció nuevamente con mayor participación en los polémicos Juegos de Múnich (Alemania) de 1972.

El top cinco de los mejores jugadores del balonmano internacional está conformado por atletas admirados y considerados héroes en sus naciones, así como también pioneros en este deporte:

• Marguns Wilander: dos veces campeón del mundo y jugador de la posición central, recordado como el jugador más destacado del siglo XX.
• Ivano Balic: siempre jugador en la posición central y condecorado como mejor jugador de todos los torneos creados para esta disciplina. Destacado atleta olímpico.
• Nikola Karabatic: ganador de la liga de campeones y mejor jugador en torneo mundial en 2011.
• Veselin Vujovic: portador de la medalla de oro en el 1984 y en la copa mundial del 1986. Siempre jugador en la posición lateral izquierda.
• Talant Dujshebaev: segundo mejor jugador del siglo XX y medallista de bronce de los juegos olímpicos.

Entre el futbol y el baloncesto

Luego de revisar el material disponible, nos atrevemos a considerar el balonmano como un hibrido entre el fútbol y el baloncesto, pues, a pesar de que su origen se da como una alternativa al fútbol, son mayores las similitudes con ambos deportes que sus diferencias. Vamos a fijarnos en algunas de ellas:

• Al igual que el fútbol, se puede practicar bajo techo o al aire libre.
• Se emplean pases, patadas y saques de meta.
• Se utiliza un balón similar al de fútbol.
• Puede sostenerse la pelota con las manos para el desplazamiento y no con los pies.
• Al igual que en el baloncesto, el juego se inicia con un saque desde el centro de la cancha.
• Se utiliza la arquería como punto focal para anotar el gol.
• El portero es el único que puede pisar el área de goles.
• Tanto en el baloncesto como en el balonmano se puede lanzar, agarrar, botar o golpear la pelota con las manos, así como también con otras partes del cuerpo (a excepción de los pies).
• Cuenta con un árbitro que marca el juego.
• Se juega durante 60 minutos en dos tiempos, al igual que el fútbol (en esto se diferencia del baloncesto, que se juega por cuartos).
• El balón puede ser de cuero o de material sintético, con pesos variables según la categoría que se juega.
• Como en el fútbol y en el baloncesto, tanto mujeres como hombres pueden practicarlo, contando con sus respectivas divisiones por edades.
• El capitán es quien marca las jugadas.
• Se hace uso de posiciones iguales que las del fútbol: central, lateral, extremo, guardameta o arquero y pivote, mejor conocido como mediocampista.
• Cuenta con un reglamento que corrige conductas agresivas y jugadas antideportivas, las cuales podrían ameritar sanciones aprobadas por las federaciones y comités que apoyan este deporte (de la misma manera como se manejan en el fútbol y en el baloncesto).

Los jugadores son fuertes, con excelente condición física y resistencia, pues pasan una hora corriendo de un lado al otro de la cancha, en jugadas ofensivas o defensivas. El contacto cuerpo a cuerpo es parte del juego y el gol es la gloria para el equipo.

En definitiva, el hombre siempre ha demostrado su interés por la práctica de deportes entre dos o más jugadores. Cada disciplina ha tomado su cancha en los países que se practican, unos más importantes, otros menos. El balonmano es poco conocido en América Latina, pero esto no significa que no existan atletas de alto rendimiento y equipos bien consolidados que se atrevan a enfrentarse contra los grandes de Europa. La disciplina forja al atleta y cualquier deportista está en la capacidad de desempeñarse en deportes que le permitan continuar creciendo y diversificando sus habilidades.